Conoce al equipo detrás de la transformación de cada peludo

Desde niño, Juan Sebastian Castillo ha tenido un corazón que late al ritmo de las patas de un perro. Todo comenzó con Sara, su primera compañera de vida, regalo de sus padres a los 14 años. Con ella aprendió que los perros hablan, no con palabras, sino con energía, y que quien sabe escucharles puede crear un vínculo único. Aquella conexión se convirtió en su motor y en la semilla de un sueño: ayudar a más personas a comprender y disfrutar verdaderamente a sus perros.

Con más de ocho años transformando familias y cambiando la vida de cientos de canes, Juan Sebastian no solo entrena perros, sino que también forma líderes humanos. Inspirado en el pasaje bíblico Job 12:7-10, ve a cada perro como un pedacito de naturaleza en casa, recordándonos que no debemos moldearlos a nuestra humanidad, sino devolverles su esencia.

Naturalista de alma y convicción, vive bajo un principio que guía cada sesión: “No se trata de controlar al perro, sino la energía dentro de ti”. Esa filosofía es la que hace que cada encuentro con él no sea solo un entrenamiento, sino una experiencia de conexión profunda, respeto y equilibrio entre dos especies que, cuando se entienden, se vuelven inseparables.